La turgencia es lo que crea una sensación de tirantez y elasticidad en la piel. El óvalo liso de la cara y la tersura de los contornos indican buena turgencia. La piel se siente bastante elástica y juvenil. Su estado se puede evaluar de forma sencilla. Es necesario tirar del dorso de la mano y soltar. Luego vea qué tan rápido volverá a su estado anterior. Si los rastros desaparecen por completo en más de cinco segundos, se deben tomar medidas urgentes.
Cuidado adecuado
La elasticidad de la piel de la mujer depende directamente del estrógeno, la hormona femenina, ya que es él quien es responsable de la actividad de los fibroblastos, células especiales responsables de la producción de los tres componentes principales de la piel: colágeno, elastina. y hialuron. Sobre todo, la turgencia debilitada se nota en la cara, el cuello y el escote, pero no olvides la importancia de cuidar toda la superficie del cuerpo. Cabe señalar que la piel del cuerpo es más áspera que la del rostro. Por lo tanto, el cuidado del cuerpo debe incluir necesariamente el uso de peelings, exfoliantes y pulidos. Las duchas regulares de contraste y el automasaje también mejoran significativamente la turgencia. La piel lucirá más joven debido a la mejora de la microcirculación sanguínea y la elasticidad de las paredes de los vasos.
Sin embargo, cremas, exfoliantes, etc., eso no es todo lo que se necesita hacer para mantener la juventud y la elasticidad de la piel. Restaurar la turgencia desde el interior ayudará a ajustar el equilibrio hormonal. Un simple ejercicio te ayudará con esto: el ejercicio de Kegel. No solo mejora el suministro de sangre a los órganos pélvicos, sino que también ayuda a regular la producción de estrógeno, la hormona responsable de la turgencia normal. La piel necesita un cuidado constante tanto por fuera como por dentro. ¡No lo olvides!
Métodos efectivos para mejorar el estado de la piel
Para mejorar la elasticidad de la piel, no es necesario gastar mucho dinero en salones de belleza e inyecciones de ácido hialurónico. Puedes empezar con baños con aceites esenciales. Por ejemplo, los aceites de palisandro, semilla de zanahoria silvestre y siempreviva son bastante efectivos para mejorar la turgencia. La piel de todo el cuerpo lucirá y se sentirá mucho más joven, lo que seguro se verá reflejado en la mejora de la piel del rostro. Al mismo tiempo, no se olvide de la importancia de una nutrición adecuada y el entrenamiento deportivo. También ayudará a restaurar la firmeza y la juventud de la piel.
En el verano, puedes hacer máscaras de sandía y melón todos los días durante un mes. Es necesario aplicar la pulpa en la cara durante 15-20 minutos, luego hacer un ligero masaje. Su piel después de tal procedimiento se suavizará y adquirirá un color saludable. Y en otoño e invierno, puedes cuidar tu piel con una eficaz mascarilla nutritiva. Para prepararlo es necesario mezclar una cucharada de leche en polvo, una clara de huevo y una cucharada de miel. Los ingredientes se mezclan completamente y se aplican sobre la piel limpia. La leche y la miel tienen un efecto nutritivo sobre la piel, y las proteínas ayudan a suavizarla. La máscara se lava primero con agua tibia y luego con agua fría.
Después de los 25, no olvides la importancia de usar productos antienvejecimiento para tu rostro y cuerpo. Las preparaciones a base de aceites aromáticos de origen natural ayudan a resolver el problema de la pérdida de elasticidad con bastante eficacia. Por ejemplo, limón, bergamota y naranja.