Los tomates llegaron a Europa desde América del Sur. Los marineros de Cristóbal Colón los trajeron junto con otras verduras, especias y otras cosas. Los amantes franceses estaban tan inspirados por su color rojo que les dieron otro nombre: "pom d-amour", que significa "manzana de amor" en la traducción, y esto justifica plenamente su nombre. Después de todo, las frutas de tomate contienen muchas sustancias útiles necesarias para el funcionamiento normal del cuerpo: vitaminas, sales minerales, fitoncidas, etc. Por la cantidad de ácido ascórbico, se pueden comparar con limones y naranjas. También son buenos antioxidantes. Sabiendo todo esto, los amantes de la cosmetología del hogar han encontrado una amplia aplicación para este maravilloso producto. El remedio favorito fue una mascarilla facial de tomate, que es muy fácil de hacer en casa.
Refresca y alisa eficazmente el rostro, nutre, tonifica, previene la aparición de arrugas finas, tiene un efecto blanqueador, alivia la inflamación. Una mascarilla de tomate, cuando se aplica regularmente sobre la piel, puede crearmilagros.
Aplicar el jugo de esta verdura en el rostro ayuda a eliminar el brillo graso en pieles mixtas y grasas, estrecha y limpia los poros.
Los europeos fueron los primeros en utilizar tomates maduros con fines cosméticos, añadiéndolos a cremas, lociones y mascarillas. Estos productos tonifican, nutren y limpian a la perfección la delicada piel del rostro, tan necesaria para la mitad de la sociedad femenina.
Para todo tipo de piel
La mascarilla de tomate con requesón es muy fácil de preparar en casa. Se necesitan los siguientes ingredientes: 30 g de requesón, 15 ml de leche, 5 ml de cualquier aceite, tomate picado, sal. La duración del procedimiento es de hasta 20 minutos. La máscara se lava con agua tibia. Dicha máscara no debe aplicarse si hay procesos inflamatorios evidentes u otros daños en la cara.
Para pieles sensibles
Pique el tomate con crema agria y aplíquelo en la cara durante 15 minutos. Enjuague la piel con agua tibia.
Producto para piel normal a grasa
Esta mascarilla facial de tomate ayuda a eliminar los brotes (granos) y mejora el tono de la piel. Para cocinarlo necesitarás: medio tomate maduro, clara de huevo, un par de gotas de aceite. Después de aplicar sobre la piel, la máscara se mantiene durante 10 minutos. Para pieles grasas, el tiempo de tratamiento se puede aumentar hasta 20 minutos. Lavar con agua o una decocción de hierbas antiinflamatorias.
Para pieles grasasCortar el tomate en platos finos o remojar el jugo en una servilleta. Aplicar en la cara, lavar después de 15-20 minutos. Esta máscara curativacierra los poros dilatados y restaura un aspecto saludable de la piel.
Tomar 15 ml de jugo de tomate maduro y 15 g de avena. Mantenga el producto en su cara por hasta 20 minutos, luego lávese la cara. Una sencilla mascarilla de tomate es muy nutritiva y destapa los poros.
Tratamiento para piel seca
Pique el tomate, agregue un poco de almidón, un par de gotas de aceite. Aplique el producto en la cara, mantenga durante 20 minutos, enjuague con agua. La mascarilla facial de almidón de tomate enriquece la piel con vitaminas y la hace saludable.
Remedio para el envejecimiento de la piel
Tomar un tomate, picarlo, agregar 15 ml de miel líquida, 30 ml de jugo de manzana, 15 ml de agua. El tiempo del procedimiento es de 15 minutos. Lave, limpie con cubitos de hielo de la decocción de manzanilla.
La mascarilla facial de tomate es adecuada para mujeres con cualquier tipo de piel en la cara y el cuello. Tampoco tiene contraindicaciones obvias, a excepción de la intolerancia individual a este producto.